En la oficina dejó de funcionar una computadora. Llamamos a un especialista. Llegó y lo arregló todo.
Sobre lo ocurrido, nos contó un empleado:
"Vino el técnico, miró fijamente a la computadora, levantó sus manos al cielo, murmuró algo, dio 10 vueltas a mi silla en el sentido contrario a las agujas del reloj, le dio una patada a la máquina, volvió a murmurar algo más y se fue. Y empezó a funcionar. Un verdadero mago".
Y ahora, la versión del técnico:
"Me llamaron para averiguar qué pasó con la PC. Por lo visto, el empleado era muy inquieto, siempre girando sobre su silla, lo que provocó que se enrollara el cable en una pata del asiento. Desenrollo el cable acordándome de todos sus antepasados. Luego, coloco la computadora un poco más lejos, enchufo el cable que se había salido, me levanto y me voy".
Moraleja: Cuando no entendés de algo es como si se tratara de magia hasta que te lo explican. Y, no subestimes ningún conocimiento, algunos acumulamos años de experiencia solo para notar cosas que otros no...
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